Cuando pensamos en alimentos ricos en hierro, lo primero que nos viene a la mente son las lentejas, las espinacas o la carne roja. Esta última es la que pensamos también cuando queremos un alimento con proteína.
Sin embargo existe un alimento que supera, con creces, a todo lo mencionado en niveles de hierro y proteína. Un alimento que te sorprenderá y que te presentamos a continuación.
El alimento con más hierro que las lentejas y más proteínas que la carne no es otro que la sangre de cerdo. Un subproducto de la industria cárnica que se utiliza desde hace siglos en la elaboración de embutidos, como la morcilla, o de platos tradicionales, como la sangre encebollada.
Se trata de un alimento con propiedades saludables debido a su contenido en proteínas de elevado valor biológico y hierro hemo. Esta es la forma más fácilmente absorbible de este elemento.
Según los datos de laFundación Española de Nutrición, 100 gramos de sangre de cerdo aportan 18,5 gramos de proteínas. Esto supone el 37% de la cantidad diaria recomendada para un adulto. Estas proteínas son casi exclusivamente plasmáticas (albúminas y globulinas), cuya digestibilidad es superior a la de las proteínas intracelulares (principalmente, hemoglobina).
Pero lo más destacable de la sangre de cerdo es su aporte de hierro, que alcanza los 42 miligramos por cada 100 gramos. Esto significa que con solo 25 gramos de sangre de cerdo se cubre el 100% de las necesidades diarias de hierro para una mujer adulta. Y también, el 200% para un hombre adulto.
Además, el hierro presente en la sangre de cerdo es del tipo hemo. Y que se absorbe mejor que el hierro no hemo que se encuentra en los alimentos vegetales.
La sangre de cerdo también contiene otros nutrientes importantes. Entre estos tenemos calcio, fósforo, magnesio, potasio y sodio. Y también vitaminas del grupo B (B1, B2, B3 y B9) y vitamina A.
Su contenido calórico es moderado (76 kilocalorías por cada 100 gramos) y su contenido graso es bajo (0,2 gramos por cada 100 gramos).
El consumo de sangre de cerdo puede aportar beneficios para la salud. Está especialmente recomendada para aquellas personas que tienen riesgo de sufrir anemia ferropénica o anemia por falta de hierro. Esta condición se caracteriza por una disminución de los glóbulos rojos o de la hemoglobina en la sangre, lo que provoca síntomas como cansancio, debilidad, palidez, mareos o dificultad para respirar.
La anemia ferropénica puede deberse a una ingesta insuficiente o una mala absorción de hierro. También a una pérdida excesiva de sangre (por ejemplo, por menstruaciones abundantes) o a una mayor demanda de hierro (por ejemplo, durante el embarazo o la lactancia). Así, el consumo de sangre de cerdo puede ayudar a prevenir o corregir la anemia, ya que aporta una gran cantidad de hierro biodisponible.
Además, la sangre de cerdo puede contribuir a mejorar el estado nutricional y la calidad proteica de la dieta. Especialmente en personas con necesidades aumentadas o con dificultades para consumir otros alimentos proteicos.
La sangre de cerdo puede ser una alternativa a la carne o al pescado para obtener proteínas completas y esenciales para el organismo.
La sangre de cerdo se puede encontrar en el mercado en forma líquida o coagulada. En ambos casos, se debe conservar en refrigeración y consumir antes de su fecha de caducidad. Antes de cocinarla, se debe lavar bien con agua fría para eliminar posibles impurezas.
Existen muchas formas de cocinar la sangre de cerdo, desde las más sencillas hasta las más elaboradas. Algunas recetas tradicionales son:
La sangre de cerdo es un alimento que no debe faltar en una dieta equilibrada y variada, ya que aporta proteínas de calidad, hierro y otros nutrientes esenciales. Además, se puede preparar de muchas formas diferentes y disfrutar de su sabor y su textura. ¿Te animas a probarla?